marchita de mi mente

El tiempo es tan frágil como nuestra mente, de un momento a otro todo parece distinto y frágil, un simple adverbio de tiempo.

Sueños e ilusiones difusos se encadenan de tu ser y los reflejos que construyen un tiempo ligeramente va desatando conclusiones apresuradas y mentiras creadas, poco a poco ves como ideas y fantasías se van alejando hasta desaparecer y convertirse en simples agonías de la mente, solo sombras de lo que fue un día de verano, una sombra invernal o una amarga sonrisa de alguien amado.

Hoy regresas en el tiempo añorando viejos pasadizos, sombríos atardeceres, olores inconfundibles que te cautivaron allá más allá en un pasado y al sentirlo nuevamente sientes que flotaras por un hechizo lejano de bosques repletos de aromas y sinfonias.

Recuerdos que pueden hacerte volar con tan solo cerrar los ojos , mirando lo que pudo haber sido sino hubieses querido caminar tan rápido, lo que hubiese pasado si hubieras hablado, lo que pasaría si hubieras dicho si, lo que se sentiría si hubieses amado, esa sombra que ahora solo es un recuerdo lejano pero que antes era alguien amado.

Solo vuela dentro de las grises nubes de los recuerdos que se atreven aterrizar en tu ser de vez en vez de año en año de brisa en brisa de mirada en mirada o lejos de la eternidad.

-Maisa-

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